La alegoría del crucero

Una vieja historia relata la historia de un hombre que quería viajar en crucero. A pesar de sus dificultades económicas ahorro para comprar su boleto .Mientras transcurrían los días se fue preparando y llenó su maleta de alimentos enlatados y galletas para el viaje. Llego el día de embarcar y todo era maravilloso, las personas muy amables, el lugar hermoso e imponente, pero cada vez que era hora de la comida el iba a su camarote y comía alguna de sus provisiones.

Así pasaron los días, disfrutando de espectáculos, vistas increíbles y una piscina hermosa. Para la última noche estaba planificado para la tripulación una cena con el capitán, y la angustia le volvió cuando pensó que no tenia dinero suficiente para esa cena, por lo que le pregunto a uno de los trabajadores del crucero que como podía hacer, a  lo que éste le respondió ..."la cena esta incluida con la compra del boleto, así como todas las comidas anteriores". Allí se dio cuenta que todas sus idas a comer al camarote fueron en vano y por lo tanto se había perdido la oportunidad de disfrutar mucho mas de aquella experiencia .

¡ Te digo que la vida es un crucero!

Primero , a  menudo soñamos con lograr algo y en ese transcurso de tiempo nos enfocamos en llenar nuestra maleta de cosas equivocadas como el odio, la envidia, el rencor  o el orgullo y que nos pesan un montón. Segundo, ya al estar en nuestro momento nos olvidamos de disfrutar plenamente de lo que estamos viviendo, de la oportunidad, preferimos recurrir de vez en cuando a esa maleta pesada llena de cosas inútiles  y alejarnos de los demás. 

pronto llega el momento en que todo cambia y recién allí nos damos cuenta que no disfrutamos lo suficiente y no valoramos del todo lo que en su momento vivimos y quisiéramos que durara un poco mas para sentir que lo disfrutamos lo suficiente.